ULTIMO MOMENTO

Es tan miserable, viene alguien pendejo o no (aunque la diferencia dice mucho para los carroña), y te mata a vos o a algún familiar o amigo y se desata la cacería, las víctimas despiden el olor de la desesperación y los rapiñeros surgen desde los ahujeros mas inmundos. La muerte inesperada que surge desde la nada a cualquier hora y porque si y sobre todo cuando es violenta produce un dolor narcótico uno queda al descubiero, despellejado, parado en la nada de la desesperación. En esos primeros minutos de locura es cuando llegan los carroñeros y te apuntan las luces a la cara, las lentes, los flashes, te avasallan y te meten los micrófonos en la intimidad de tu locura y no te dejan ni respirar te inducen a que digas lo que ellos quieren escuchar, lo que a ellos les da vida, se alimentan de la sangre de tus muertos, de la carne de tu angustia. Es una conducta deliberadamente cruel, planificada, tan afilada que en 20 minutos ya hay una marcha organizada pidiendo todo tipo de incongruencias y batiendo banderas inverosímiles. La gente jamás se pone de acuerdo para nada, solo cuando es inducida por los rapiñeros que les manejan las conductas, les inyectan la ponzoña y controlan sus actos. No te dejan solo ni en la autópsia (publican los detalles hasta la célula),ni en el velatorio ni en el entierro, no pueden perder ni un segundo cuando una familia o un grupo de gente está vulnerable, chupan todo flujo de dolor y angustia que recorra sus venas, controlan cada movimiento y lo publican y emiten en vivo, te esclavizan, te muestran, te exponen, te investigan y te hacen sentir protagonista, y te hacen sentir acompañado, y te hacen sentir comprendido. Y un día de pronto desaparecen en un suspiro, han percibído el aroma fresco del dolor en otro lado y salen arrastrandose a toda velocidad antes que las próximas víctimas puedan pensar en lo que les está pasando, inyectan sus ponzoñas y empiezan a publicar, apuntan las parabólicas al cielo y tu cara está en vivo en todos los hogares. Ultimo Momento.